Max es un niño de quince años. Tiene un hermano y madre a su cargo. Hace algunos meses, comenzaron a recibir visitas de unos matones a sus chabolas, amenazándoles de muerte, así que tuvieron que abandonar su casa y buscar un nuevo lugar para que no les pudieran encontrar. Al mismo tiempo asiste a los talleres de MANITOS, pero con tal carga encima, su formación pasa a un plano irrelevante. Necesita dinero para poder pagar la casa nueva y no lo tiene.
Acompañanos a Erica a visitar a su familia para conocer como estaba la situación. “en la casa donde estábamos nos votaron y ahora no nos dan terreno en la nueva invasión, además no tenemos plata para pagarla”.
La situación era muy difícil. Cuando se produce una nueva invasión, como la que acababa de ocurrir en un terreno colindante al campamento donde estábamos, el líder que la organiza, realiza una “junta de vecinos” en la que se reparten los espacios, se pagan las cuotas, etc. ¡¡¡Era una reunión de vecinos de más de 400 personas en medio del desierto!!! Erica nos pidió que nos quedásemos alejados. “los gringos tienen plata, y si venís con notros no nos la van a creer”, así que nos volvimos al coche con Don Héctor.
Además del problema de no tener casa asignada, se sumaba que necesitaban dinero para comprar el terreno. 500 soles, algo más de 100 €. La asociación tiene financiación para los proyectos educativos que están establecidos, pero son fondos con un fin y personas asignadas, así que no hay recursos para situaciones de este tipo. Hablamos con Gabi, la directora de MANITOS, y nos dijo que ahora tenían que montar campañas especiales para recaudar fondos y poder ayudarles. Si se les deja a ellos, es muy probable que les cueste algún tiempo lograr reunir el dinero, lo cual interferiría con la formación de Max.
La familia organizará una chicharronada entre los amigos para conseguir dinero, es una merienda en la que cocinan para todo el que quiera venir y cada uno hace su aportación al fin.
Gracias a la recaudación de fondos que hicimos entre los compañeros del trabajo, antes de venir para acá, conseguimos reunir unos 400 soles. Éstos han ido íntegramente a financiar la nueva casa de Max.
Gracia Max, gracias Gabi y gracias a todos por vuestra aportación.
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